Alessandria y alrededores

La Ciudad de Alessandria fue fundada en 1168, a partir de la uniόn de algunos pueblos: la zona era importante desde el punto de vista estratégico y comercial, en el cruce de caminos entre Piemonte y Francia, hacia Liguria y Lombardía a través de los ríos Bormida y Tanaro.
La impronta medieval sigue siendo evidente en el centro Histόrico, especialmente en barrios como el pueblo de Rovereto, donde se encuentra la iglesia más antigua de la ciudad, Santa Maria di Castello (siglo XII). La iglesia se levanta sobre la antigua fortificación de Borgo Rovereto, el antiguo núcleo de la ciudad. Fue construido en su actual estilo gótico lombardo tardío entre 1476-1545. La fachada es tripartida y es adornada con un portal renacentista de piedra. La iglesia tiene un rico patrimonio de obras artísticas. A la izquierda de la iglesia se extiende el claustro, cuyo refectorio guarda el fresco de una crucifixión, obra de de Timoteo da Vercelli del año 1520.
La iglesia de Santa Maria del Carmine (siglo XIV) tiene una fachada gótica y paredes de ladrillo a vista.
En la Plaza de la Libertad es posible admirar algunos de los edificios más significativos: el municipio actual y el antiguo, Palatium Vetus, el Palacio Ghilini del siglo XVIII (sede de la prefectura y la provincia), el edificio de correos y telégrafos con el Mosaico Severini. La plaza albergό originalmente la antigua Catedral Medieval.
La actual Catedral tiene majestuosas formas del siglo XIX y un campanario que se destaca sobre el paisaje de la ciudad. La Catedral fue construida entre 1875 y 1879, en sustitución de la antigua catedral románica derribada por Napoleón. A la izquierda de la fachada neoclásica se erige el alto campanario (106 m). El interior, en forma de cruz latina con tres naves, presenta una decoración al fresco atribuible casi en su totalidad a Luigi Morgari. La cúpula está decorada con 24 estatuas de santos patronos de las ciudades de la Liga Lombarda. La capilla de San Pio V alberga uno de los principales restos artísticos del siglo XIV en la ciudad: la Virgen con el Niño, conocida como la Madonna dell'uscetto. De época renacentista destacan: La Pala con San Pietro (1546), dos esculturas de madera atribuidas a Baldino di Surso (mediados del siglo XV) y el Crucifijo que se encuentra en la primera capilla a la derecha. La Madonna delle Salve, patrona de la ciudad, también se remonta a los mismos años.
Continuando por Vía Parma, se puede visitar Palacio Cuttica, sede del prestigioso conservatorio y las salas de exposición con los manuscritos decorados del Papa Pío V.
Las salas de arte se encuentran en el edificio que alberga la Biblioteca Cívica: merece la pena visitar el ciclo de frescos dedicado al ciclo Rey Arturo de final del siglo XVI y la colección de pinturas y cuadernos de Giovanni Migliara.
La Ciutadela es una fortaleza militar que hoy es un monumento Histórico y parque, desde 2016 está conectada a la ciudad por el puente diseñado por Meier, un arco blanco que enmarca el panorama del Río Tanaro.
Para los amantes de la bicicleta, recomendamos una visita al Museo de Alessandria de las bicicletas ubicado en el Palacio Monferrato y para los entusiastas de las compras, una parada en la histόrica tienda Borsalino es obligatoria, la sede original de la fábrica Borsalino alberga parte de la Universidad de la ciudad.

Acqui Terme y alrededores
Fundada por los Ligures Statelli, fue rebautizada como “aquae statiellae” por los romanos en referencia a las aguas termales que todavía fluyen en el centro de la ciudad. Más tarde se convirtió en sede y centro episcopal de una gran zona, tanto que la impronta medieval se conserva bien, por ejemplo en el barrio de Pisterna y en la Catedral.
La visita empieza de la fuente de “Bollente”, fuente de agua caliente a 75 grados, en 1870 se erigió el edículo en forma de tiempo griego por el ingeniero Ceruti. Las otras fuentes están ubicadas en el area de bagni, donde se encuentran los establecimientos de tratamientos termales.
Subiendo por Vía Scatilazzi, encontrará los restos del antiguo Teatro Romano y luego llegará al Castillo de Paleologi (siglo XV), la casa histórica de los Marqueses de Monferrato y antigua sede del Museo Arqueológico. Los otros yacimientos arqueológicos que merecen una visita son la Piscina Romana de Corso Bagni y los majestuosos arcos del acueducto.
La Catedral de la Asunción fue consagrada en 1067 por San Guido, obispo y patron de la ciudad, la estructura romanica ha sido objeto de numerosas intervenciones a lo largo de los siglos, como en la fachada con el portal de mármol esculpida por el maestro Antonio Pilacorte (1481). En el interior, merece especial atención el Triptico de Nuestra Señora de Montserrat del pintor español Martolomeo Bermejo.
Justo afuera se encuentra Villa Ottolenghi, una joya de arte y la arquitectura del siglo XX, cuyo jardin ganó en 2012 el premio “mas bello de Europa”.
En las bodegas del Palacio Robellini se encuentra la Enoteca Regional dedicada al preciado Bracchetto d’Acqui DOCG.

Casale Monferrato: lugar de referencia, durante siglos, de un territorio fértil y estratégico. Su centro histórico presenta los testimonios de los fastos antiguos y de su multifacética identidad: desde la antigua Catedral de Sant'Evasio, con el espléndido nártex, el crucifijo románico y el Museo del Tesoro del Duomo, hasta la Sinagoga de estilo barroco y los Museos Hebreos.
Cruzar el núcleo de la ciudad significa cruzar los históricos pórticos, elegantes edificios e iglesias majestuosas. A pocos pasos de las principales calles surge el Castillo del Monferrato, una vasta y "gloriosa" ciudadela militar hoy utilizada como espacio para exposiciones y eventos.
Para los amantes del arte y la cultura, además de los monumentos y sitios de interés (destaca entre otros la Torre Cívica), Casale Monferrato conserva un patrimonio envidiable de obras de pintura, escultura y cerámica, guardadas en el Museo Cívico y la anexada Gipsoteca Bistolfi, en el antiguo convento agustino de Santa Croce.
El segundo domingo de cada mes (y el sábado anterior) Casale Monferrato se convierte en destino turístico gracias a Casale Città Aperta, iniciativa para dar a conocer monumentos y museos ciudadanos, con visitas guiadas (domingo por la tarde). En concomitancia con Casale Città Aperta hay también el Mercado de las Antigüedades (en agosto sólo el segundo domingo). En cambio, el tercer sábado del mes (excepto agosto), cita con Il Paniere, mercadillo de productos orgánicos y artesanales. Para informaciones y actualizaciones, visite la sección de Eventos de la página web.
Imposible olvidar las típicas galletas Krumiri Rossi di Portinaro en el típico envase de lata, De.Co. del Municipio y Marca Histórica, así otra De.Co. los agnolotti de Casale.

El nombre de Novi Ligure recuerda la antigua pertenencia a la República de Génova: la influencia de Liguria todavía es perceptible hoy en el uso de pintar las fachadas de las casas de los comerciantes nobles y ricos con elementos arquitectónicos falsos y figuras históricas y mitológicas, merecedoras del nombre de “Ciudad pintada” y hace de los paseos por el centro histórico un descubrimiento continuo de nuevas vistas y detalles. El ejemplo más interesante de esta decoración es la Plaza Dellepiane, dominada por el Palacio Durazzo, el Palacio Cambiaso Negrotto, el Palacio Negrone y la Colegiata, de origen medieval reconstruida en ricas formas Barrocas.
Merece una visita, el Oratorio de la Maddalena, un auténtico tesoro escultórico. La lamentación sobre Cristo muerto (siglo XVI) consta de ocho estatuas de terracota policromadas, a las que se añadió posteriormente el Cristo de madera del siglo XVII. El monumental monte Calvario ocupa todo el espacio del ábside y fue construido a finales del siglo XVI con veintidós estatuas de madera de tamaño natural pintadas en vivos colores.
Parada imprescindible para los amantes de la bicicleta, el Museo dei Campionissimi que es un homenaje a la historia del ciclismo y a los grandes noveles Fausto Coppi y Costante Girardengo. Cuarenta bicicletas cuentan la evolución técnica, desde el primer modelo de madera al modelo diseñado a finales del siglo XV por Leonardo Da Vinci, hasta los recientes prototipos en titanio, mientras películas de época y testimonios de clubes deportivos cuentan las victorias de los dos campeones.

La ciudad de Ovada se encuentra en el lado norte de los Apeninos de Liguria, donde confluyen los arroyos Orba y Stura, está rodeada de colinas cultivadas y bosques que crean un paisaje muy variado. La aqruitectura, la cocina y las tradiciones son una combinación de derivaciones piemontesas e influencias de Liguria. Las fachadas ricamente pintadas de los palacios nobles son un ejemplo de la influencia de Génova en la arquitectura de Ovada, al igual que algunas tradiciones religiosas muy importantes, como las procesiones de las confradías, que desfilan por las estrechas calles del centro con inmersos crucifijos y grupos de esculturas. Entre los más bellos se encuentran los que se conservan en el Oratorio de San Juan Bautista: la majestuosa Decapitación del Bautista de Maragliano y el Bautismo de Jesús.
La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción caracteriza el paisaje de la ciudad por el alzado de la fachada, la Cúpula circular y los dos campanarios. El altar mayor fue diseñado por Alessandro Antonelli, el Lienzo con el Éxtasis de Santa Teresa fue pintado por Luca Giordano.
El Museo Paleontológico dedicado a Giulio Maini, un naturalista de Ovada, se encuentran en la iglesia de Sant’Antonio del siglo XIV: las colecciones de fósiles son principalmente locales, las más importantes son las de Calappilia Maini, una specie de cangrejo que se encuentra solo en esta área.
Las colinas circustantes están llenas de Castillos, Rocca Grimalda, Cremolino y Montaldeo tienen cada uno el suyo.
Para los amantes de la comida y el vino, una parada fundamental es la Enoteca Regional dedicada al Dolcetto de Ovada Superior DOCG.

La ciudad de Tortona fue fundada en el año 120 a.C. con el nombre de Derthona, en la intersección entre las carreteras consulares Postumia y Fulvia: algunos restos arqueológicos todavía son visibiles hoy en las áreas arqueológicas de Vía Emilia, Vía alle Fonti, Vía Rinarolo y Vía Arzani. Los hallazgos romanos más valiosos, incluido en monumental sarcófago de mármol blanco de Elio Sabino, se recogieron en el Palacio Guidobono, el sitio de exhibición municipal. El edificio fue construido en el siglo XV como casa señorial de la importante familia noble, con una torre en el patio. En el interior también se ha recreado el taller del maestro titiritero Peppino Sarina, con numerosos elementos de utilería del teatro de marionetas.
La ciudad, sede de una de las Diócesis más antiguas del norte de Italia, conserva numerosos lugares religiosos de gran importancia histórica y artística: además de la Catedral de S. Maria Assunta y San Lorenzo, recomendamos visitar S. Maria Canale, el Santuari de la Madonna della guardia, con su estatua dorada visible desde una gran distancia, y el Museo Diocesano, que alberga un precioso manuscrito púrpura de los siglos V – VI.
Imperdible para los amantes de la pintura, es la Pinacoteca del Divisionismo, que reúne más de ochenta obras de las décadas del siglo XIX y principios del XX, entre las que destacan las pinturas de Giuseppe Pellizza da Volpedo.
Con un agradable paseo se puede llegar a Colle Savo, ahora transformado en un parque donde quedan una torre y algunas ruinas de las murallas del Castillo para recordar que una parte de la ciudad medieval se encontraba en la colina por motivos defensivos.
La zona también es famosa por sus vinos, mencionamos el DOC Colli Tortonesi y el recentemente redescubierto Timorasso.

Valenza es ampliamente reconocida como una Capital Europea de la Orfebrería Artesanal: en 1840 Vincenzo Morosetti inició esta industria y después de décadas de crecimiento, hoy hay decenas de talleres que crean joyas de todo tipo, piezas únicas y exclusivas que saben combinar la tradición local al diseño internacional. Las más prestigiosas del sector han decidido trasladar su sede a Valenza, para producir pequeñas obras maestras y formar a los joyeros del futuro. Periódicamente se realizan ferias y exposiciones temporales dedicadas a la joyería y su historia.
En la plaza principal de Valenza, dedicada a los Mártires XXI, se levanta la Catedral de Santa Maria Mayor, con sus formas sobrias del siglo XVII, que alberga un hermoso cuadro de Moncalvo dedicado a la Virgen del Rosario, y una pequeña colección de documentos y objetos de Arte Sagrado.
Al otro lado de la plaza está el Palacio Valentino, que fue la sede del antiguo Ayutamiento y hoy alberga la Biblioteca y el Centro Municipal de Cultura: construido a finales del siglo XVIII sobre un proyecto de Vincenzo Lombardo, fue renovado en la decada de 1960, por el arquitecto valenciano Pier Massimo Stanchi, manteniendo algunas partes del casco antiguo, a las que se añadió una nueva estructura arquitectónica en hormigón y ladrillo, según una sugerente y atrevida solución que prevé una escalera circular que asciende desde del antiguo patio, iluminado por lucernarios radiales.